#70453 Reino: El Peligro de ignorar el Nuevo Pacto

Escrito por Leo Fenton Received 3/15/2011 Traducido por Gleibys García

Hasta que Dios decretó un Nuevo Pacto, el hombre natural no podía hacer nada para agradar a Dios simplemente porque los que están en la carne NO PUEDEN agradar a Dios. Esta imposibilidad, sin embargo, no le impidió al hombre natural tratar de agradar a Dios. Exactamente lo mismo sucede hoy en día. Cada domingo miles de iglesias se llenan de personas que quieren agradar a Dios. Todo hombre natural que se propone agradar a Dios por medio del esfuerzo humano ha terminado siendo engañado al pensar que tuvo éxito o con el testimonio “¡Miserable de mí!”.

Aun así, en cada dispensación Dios aceptó a personas que dieron lo mejor de sí por medio del esfuerzo humano, y los declaró perfectos en sus generaciones. Por ejemplo, David pecó de una forma terrible, pero Dios lo perdonó y lo declaró perfecto en su generación. Moisés estuvo en problemas cuando golpeó la roca, mas fue perfecto en su generación. Sin embargo, ese tiempo pasó con el advenimiento del Calvario y del Pentecostés. Ahora se afirma claramente que los que están en la carne NO PUEDEN agradar a Dios. Antes del Nuevo Pacto no existía otra provisión que le posibilitara al hombre vivir en cualquier otra dimensión que no fuera la dimensión carnal. La carne gobernó la vida de los hombres durante 4000 años después de Génesis 3.

Hasta que Dios decretó el Nuevo Pacto después del Calvario, el testimonio fue el mismo durante 4000 años de Génesis a Malaquías hasta el Calvario. Cuando Dios prometió que decretaría un Nuevo Pacto que no sería como el Antiguo Pacto, al fin hubo una esperanza de que el hombre fuera capaz de vivir de forma tal que agradara a Dios. El Nuevo Pacto prometió que Dios haría una obra especial en el interior del hombre que le permitiría vivir en una dimensión diferente denominada “ESPÍRITU”. David se dio cuenta que su principal problema era algo en su interior que él mismo no podía controlar.

Salmo 51:2] Lávame más y más de mi maldad, y límpiame de mi pecado. [3] Porque yo reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre delante de mí. [4] Contra ti, contra ti solo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos; para que seas reconocido justo en tu palabra, y tenido por puro en tu juicio. [5] He aquí, en maldad he sido formado, y en pecado me concibió mi madre. [6] He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo, y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría.

Salmo 51:7] Purifícame con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la nieve. [8] Hazme oír gozo y alegría, y se recrearán los huesos que has abatido. [9] Esconde tu rostro de mis pecados, y borra todas mis maldades. [10] Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.

Este clamor del corazón de David siempre ha sido la carga del hombre natural que quiere agradar a Dios. Desde los fracasos del hombre en Génesis 3, el clamor ha sido: Oh, Dios, ¿cómo puedo vivir para agradarte y completar tu propósito para mi vida? Algunas personas que pertenecieron a la raza del primer Adán han hecho esta pregunta a Dios en cada generación durante 6000 años. La vida de algunas de estas personas frustradas ha sido registrada en la Biblia. Algunas de estas personas fueron profetas escogidos por Dios para hablar a Su pueblo y la Biblia registra sus testimonios. Algunas de ellas también viven en nuestra dispensación desde el Calvario. Pocos están leyendo este documento.

Sin embargo, cada persona en cada generación que ha tratado de agradar a Dios pronto descubre su propia incapacidad y fracaso. David descubrió esta verdad y la expresó en el Salmo 51. Él descubrió que la causa de su fracaso era algo dentro de sí mismo que era relativamente malo y estaba allí desde que nació. Él comprendió totalmente que necesitaba una obra interior de Dios que fuera mucho más que el perdón de pecados. Necesitaba una transformación y purificación en el hombre interior.

El hombre vivió desvalido en esta condición de fracaso, pecado y condenación desde Génesis 3 hasta el Calvario. El hombre natural, aunque crea en Jesús y se llame a sí mismo “cristiano”, aún experimenta este mismo fracaso hoy en día, 2000 años después del Calvario. Muchas de estas personas están en la iglesia cada domingo preguntándose por qué siempre fallan. Los pastores están llenos de compasión y constantemente le aseguran que después de todo son humanos y que Dios entiende su debilidad. Les aseguran que Dios los ama como son.

No obstante, con la serie de eventos relacionados con el Calvario y el Pentecostés, Dios comenzó a resolver este antiguo problema de tratar de servir y agradar a Dios en la carne y con la habilidad humana. Sin embargo, no fue solamente el perdón de pecados lo que resolvería el fracaso y la incapacidad del hombre cuando se dispone a servir a Dios, cumplir Su Propósito Eterno, hacer la total voluntad de Dios y vivir su vida para agradarle a Él. Damos gracias a Dios por la sangre y el sacrificio del Calvario, pero aún con el perdón de pecados el hombre natural NO PUEDE agradar a Dios porque todavía está “en la carne”.

Ahora Dios ha resuelto este antiguo problema a través de la introducción de un pacto completamente nuevo por medio del cual, si el hombre participara totalmente en su provisión, podría finalmente agradar a Dios.

Dios no habló palabras de consuelo como el pastor local ni le dijo al hombre: “Sí, conozco los deseos de tu corazón, y si pudieras agradarme lo harías, pero sé que no puedes”. NO. Dios no solamente resolvió estos problemas de una forma absoluta a través de la serie de eventos relacionados con el Calvario y el Pentecostés, sino que también puso toda esta provisión definitiva en la forma de un Nuevo Pacto irrevocable y eterno. Luego, Él estableció a Jesucristo como el único Mediador del Pacto que Dios ha hecho con el hombre y declaró que Jesús es la garantía de ese mejor pacto. Podríamos preguntarnos si este pacto es mejor que cualquier otro. Es mejor que todo pacto que le antecedió. No solamente esto, sino que la sangre de Jesús fue derramada para establecer, afirmar y sellar el Pacto Eterno.

Hebreos 13:20] Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno…

Cuando la “iglesia” decidió centrar sus esfuerzos en el perdón de pecados por medio de la sangre del Calvario como “total salvación” en vez de adentrar a las personas en el Nuevo Pacto de forma práctica, la provisión del Nuevo Pacto se hizo casi irrelevante para la iglesia visible. En muchos lugares, los que están en los bancos de la iglesia nunca han escuchado hablar acerca del Nuevo Pacto. He conocido pastores que nunca han escuchado hablar del Nuevo Pacto y que lo consideran una extraña doctrina. ¿Por qué? Porque dicen abiertamente que todo lo que necesitábamos para ser salvos tuvo lugar en el Calvario y NADA se puede añadir a ese sacrificio. Por supuesto, fue por medio de ese sacrificio absoluto que se le permitió al Espíritu Santo ser derramado y al Nuevo Pacto ser establecido.

Hechos 2:32] A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos. [33] Así que, exaltado por la diestra de Dios, y habiendo recibido del Padre la promesa del Espíritu Santo, ha derramado esto que vosotros veis y oís.

Su respuesta defectuosa con respecto al Nuevo Pacto es esta: Somos “salvos” por fe, por decir ciertas palabras y creer cierta doctrina. ¿Cómo puede la provisión del Nuevo Pacto hacernos más que salvos? Presentar el término “salvo” como algo definitivo ha sustituido al Nuevo Pacto como el medio de mover al hombre de la dimensión terrenal hacia la dimensión en la cual el hombre cumple el Propósito Eterno de Dios. La deplorable situación de la iglesia es el resultado de este desconocimiento en el púlpito. Cada uno de nosotros necesita la provisión de la realidad del Nuevo Pacto como una experiencia personal para ser creyentes del Nuevo Pacto. El Nuevo Pacto “salva progresivamente” a cada persona que lo experimenta. Parece que este desconocimiento es universal entre las iglesias evangélicas que predican la salvación como la última obra de la gracia. El resultado de este error puede apreciarse como un completo fracaso para reconocer la Verdad y la provisión de Dios. Esto se demuestra en cada grupo que supone que podemos ser “salvos” fuera del Nuevo Pacto.

Durante años el hombre natural (que cree en Jesús) ha tratado de servir a Dios en la carne. Servir a Dios en la carne NO se ha considerado como un serio fracaso porque todos lo hacemos, y además ni siquiera sabemos lo que significa servir a Dios en el Espíritu. Esto parece ser demasiado místico para ser importante o incluso válido. Incluso en las Iglesias Pentecostales cuando se explica lo que significa estar “en el Espíritu”, esto es tan confuso y abstracto que suena como otro cliché.

Romanos 8:6] Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz. [7] Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden; [8] y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.

Servir a Dios en la carne es una pérdida total de tiempo y es contado como un fracaso, además Dios rechaza esto. La meta de la “salvación” a la cual se hace referencia aquí es que debemos ser capaces de vivir nuestra vida para agradar a Dios. Sin embargo, si permanecemos en la carne, seremos condenados a una vida que nos impedirá “agradar a Dios”. Pero, ¿qué más da si agradamos a Dios o no, si es que “somos salvos por fe y no por obras”?

Ciertamente, muchos de nosotros tratamos de agradar a Dios en la carne (por medio del esfuerzo humano), pero terminamos confesando: “¡Miserable hombre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte?”. Pronto me di cuenta de que simplemente no era capaz de agradar a Dios aunque me esforzara lo más que podía. Esto fue DESPUÉS de haber recibido el Espíritu Santo. Estaba dispuesto a hacer Su voluntad, pero descubrí que era totalmente incapaz. Le pedí a Dios que me ayudara a servirle en mi habilidad natural pero con unción, y Él ignoró mi petición. ¿Por qué? Dios sabía que este método fracasaría, así que me salvó del fracaso ignorando mi petición de ayuda.

El desconocimiento de la provisión del Nuevo Pacto no es una excusa válida para la iglesia visible hoy en día. Es precisamente por esto por lo que debemos predicar el Reino de Dios y sus demandas como posibles SOLAMENTE cuando el Nuevo Pacto es una realidad práctica. ¿Cómo sabemos esto? Porque el Reino fue introducido y predicado por Juan el bautista y Jesús como algo cercano. ¿Qué incluye esto? El Nuevo Pacto iba a ser decretado cuando viniera el Mesías.

Nuestro mensaje del Reino debe comenzar por declarar que debemos participar cabalmente en la total provisión del Nuevo Pacto para participar en el Reino y satisfacer sus demandas. ¿Por qué? Porque quien no haga la voluntad de Dios no puede entrar en el Reino. Tratar de hacer la voluntad de Dios en la carne es evidentemente rechazado por Dios. Sin embargo, hacer la voluntad de Dios es lo que se necesita para acceder al Reino de Dios.

Mateo 7:21] No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.

Está claro que la incapacidad, la lucha y el fracaso de los “cristianos” para hacer la voluntad de Dios provienen de una poderosa imperfección y vulnerabilidad inherentes en nosotros, y constituyen una deficiencia subjetiva que no se resuelve por medio de la educación. Esta es una incapacidad inherente en todo hombre natural. El deseo de servir a Dios también es inherente en nosotros, pero el hacer Su voluntad no es inherente en nosotros.

Romanos 7:18] Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo. [19] Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago.

Parece que cada uno de nosotros está atascado en esta condición deplorable hasta que participemos de las provisiones del Nuevo Pacto. Sabemos que la respuesta al fracaso de Romanos 7 es Romanos 8, pero es el Nuevo Pacto el que nos provee la oportunidad de recibir al Espíritu Santo y vivir en Romanos 8. Sin embargo, la verdadera capacidad para hacer Su voluntad solamente puede hallarse en la total provisión del Nuevo Pacto. Esta no es solamente mi doctrina, sino que es un hecho bíblico que podrá apreciarse claramente cuando enumeremos las provisiones del Nuevo Pacto.

Ahora un serio problema aparece nuevamente cuando leemos estas mismas escrituras, pero luego conceptualizamos esta verdad e intentamos entenderla con la mente natural. En algún momento cada uno de nosotros debe llegar a la realidad de “Oh, miserable de mi” para rendirse a la realidad del Nuevo Pacto. La realidad de la confrontación de Isaías 6 es esencial para atravesar el segundo velo. Luego, debemos decidir si aceptamos esta incapacidad inherente como un hecho invariable asociado al fracaso humano. Estamos conscientes de que si continuamos viviendo en la carne, estamos destinados a fracasar en cumplir el Propósito de Dios para nuestra vida.

Sin embargo, si este mensaje fuera totalmente predicado, y quizás si estuviéramos totalmente convencidos, podríamos aceptar que Dios ha encontrado una solución para esta condición terrible y deplorable denominada “carne”. Esa “solución” para la limitación natural es la experiencia personal del Nuevo Pacto en el cual media directamente el Señor Jesucristo. Él mismo es dado como nuestra garantía de que el Nuevo Pacto es suficiente para cada uno de nosotros. ¿Cómo? Al ser testigos de Su testimonio y Su Vida de vencedor.

Nos damos cuenta de nuestro extremo fracaso y absoluta incapacidad cuando intentamos “proseguir a la perfección”, crecer en todas las cosas en Cristo o presentarnos a Jesús sin mancha o arruga, o cosa semejante. Con certeza nos convenceremos de que el hombre natural nunca cumplirá estas demandas ni será santo e irreprensible. Este requisito para la iglesia revela el error de presentar el concepto de “total salvación por medio del perdón de pecados”, que es tan popular entre los evangélicos.

Cuando comprendemos el propósito de Dios para el mundo venidero, vemos este error de la “Total Salvación en el altar de bronce en el atrio”. La realidad y experiencia de proseguir hacia la perfección se ha reducido a otra doctrina de la iglesia. Por supuesto, “la salvación por la fe” es una doctrina válida, pero cuando es presentada como la meta y el propósito de Dios para alejarnos del infierno llega a ser un engaño o al menos una doctrina distorsionada. Ser capaces de ver el altar de bronce (Calvario) con respecto al Lugar Santísimo y al Trono del Reino de Dios devela este error gráficamente. Presentar el altar de bronce (Calvario) como “la salvación del infierno” es demasiado superficial e ignora su verdadero objetivo, el cual es solamente una de las experiencias para la preparación para el Sacerdocio eterno según el orden de Melquisedec. También es una provisión del Nuevo Pacto que declara “perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado”. El Nuevo Pacto extiende nuestra salvación para que seamos capaces de vivir para agradar a Dios y ser salvos por el Propósito Eterno de Dios (Lugar Santísimo).

El altar de bronce en el Tabernáculo de Moisés es una copia y sombra de la realidad que tuvo lugar en el Calvario. El altar de bronce en el Tabernáculo de Moisés y los diferentes sacrificios eran esenciales para participar en el Antiguo Pacto que se inició en el Monte Sinaí. La realidad del Calvario y la declaración “perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado” son parte del Nuevo Pacto que nos conecta con el Monte Sion, la Nueva Jerusalén y el Reino de Sacerdotes.

Jeremías 31:34] Y no enseñará más ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová; porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice Jehová; porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado.

Esta es solamente una de las grandes provisiones del Nuevo Pacto. Sin embargo, esta es una de las bendiciones que se ofrece a los que participan del Nuevo Pacto, quienes pueden experimentar totalmente todas estas provisiones. Existe también otro error en la iglesia visible, que supone que el Nuevo Pacto se aplica a TODOS los creyentes que acepten a Jesús como Salvador personal. Ciertamente, el Nuevo Pacto está disponible para TODOS los creyentes, pero no a TODOS los creyentes se les ha hablado acerca de las otras provisiones. Algunos no están dispuestos a pagar el precio para participar de la total provisión. Por esta razón, existen multitudes en la parte exterior, que desconocen todos los beneficios.

Esto también es cierto acerca de “la salvación”. En muchas iglesias que predican la “salvación” hay muchos que no son “salvos” simplemente porque no cumplen los requisitos de Dios.

2 Tesalonicenses 2:13] Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad…

1 Pedro 1:2] elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.

Sin embargo, cualquiera que “cree algo acerca de Jesús” puede ser considerado un buen miembro en muchas iglesias, aunque no haya nacido de nuevo. Algunos de los que no son salvos aun están en el púlpito. Es por eso que insistimos en que cada nuevo creyente tenga la experiencia de la realidad del Nuevo Pacto.

Es por eso que siempre resistimos la tentación de proclamar “la doctrina del Nuevo Pacto” porque se puede enseñar o aprender sin ninguna experiencia en absoluto.

Después de haber viajado y compartido en muchos países y en diferentes tipos de iglesias, se ha hecho evidente que la mayoría de las iglesias ha escuchado la palabra “Nuevo Pacto”, pero casi ninguna puede explicar lo que significa o en qué se diferencia del Antiguo Pacto. Algunos tienen lo que denominan “cinco ministerios” pero no tienen idea de cuál es la provisión del Nuevo Pacto o ni siquiera por qué esta es importante. Ciertamente conocen los daños y el peligro de seguir el Antiguo Pacto, pero desconocen el Nuevo Pacto que lo reemplazó hace 2000 años.

Los “cinco ministerios” de la multitud en pañales obviamente no saben nada acerca del Nuevo Pacto, o quizás lo han ignorado. Hemos descubierto que la “multitud en pañales” ABARCA los cinco ministerios en muchos lugares. Como el Nuevo Pacto es básico para nuestra salvación, esta ignorancia parece estar acercándose a lo criminal.

También hemos descubierto que en muchos lugares G12 se refiere a la talla del pañal que encaja en el ministerio. Por supuesto, también podrían existir las tallas G1 o G3 en muchos lugares que encajen en los creyentes. En algunos grupos un pañal talla G7 encajaría en alguien que es considerado muy maduro. Sospecho que este desconocimiento de la provisión del Nuevo Pacto y la falta de una genuina experiencia es la razón por la que vemos tanta carnalidad e inmadurez tanto en el “ministerio” como en los creyentes.

¿No es esto más desaprobación y crítica al sistema eclesiástico que nos ha fallado? Sí. Pero no sin razón o prueba de su fracaso. ¿Cómo sabemos esto? Porque una provisión del Nuevo Pacto es esta: “Y no tendrán necesidad de que nadie les enseñe porque todos serán enseñados por Dios”.

1 Juan 2:27] Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; así como la unción misma os enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, según ella os ha enseñado, permaneced en él.

Juan 6:45] Escrito está en los profetas: Y SERÁN TODOS ENSEÑADOS POR DIOS. Así que, todo aquel que oyó al Padre, y aprendió de él, viene a mí.

Isaías 54:13] Y todos tus hijos serán enseñados por JEHOVÁ; y se multiplicará la paz de tus hijos.

Hoy en día, sería muy extraño encontrar una iglesia que crea esta escritura, sin mencionar que ni tan siquiera se espere que sea posible que Dios nos enseñe a todos. Sería muy difícil encontrar una Iglesia Pentecostal que crea que no necesita continuar enseñando a los creyentes, aun cuando han pasado 30 años en la iglesia. Pocos creen que la unción puede enseñar todas las cosas a TODOS en la iglesia. ¿Por qué? Porque creen que SOLO los ministros pueden ser enseñados por Dios. ¿Por qué es normal este error? Porque las otras provisiones del Nuevo Pacto se han ignorado como experiencias. Es SOLAMENTE a través de la total provisión del Nuevo Pacto que nos prepararemos para hacer la total voluntad de Dios, para cumplir Su Propósito Eterno y llevar a cabo el ministerio.

¿Por qué la “unción interior” ha fracasado en enseñarnos todas las cosas? En algunos lugares se enseña que la “unción” no existe o que no se necesita porque ahora tenemos la Biblia y hemos preparado a los hombres para que nos enseñen. Anteriormente, solo existían pescadores ignorantes e indoctos para enseñar así que necesitaban la unción para enseñar a los demás. En otros lugares descubrimos que piensan que la “unción” es solamente hablar en lenguas o profecía. No existe ni siquiera una esperanza de que la “Unción Interior” nos enseñe todas las cosas porque todavía estamos centrados en la “unción del hombre exterior”, la cual es por medio de los dones. Si no existe un Nuevo Hombre Interior, NO habrá unción interior simplemente porque la “enseñanza interior” es solamente para el Nuevo Hombre Interior y NO para el intelecto del hombre exterior. Es por eso que los que están “en la carne” y “en el púlpito” no pueden producir nada eterno.

¿Por qué predominan aún las obras de la carne en la iglesia en todas las localidades? Simplemente porque las provisiones del Nuevo Pacto no han sido la verdadera experiencia del clero o los creyentes. Ellos simplemente han sido instruidos para recibir a Jesús como Salvador personal y recibir el paquete completo llamado “salvación”. Es como si pensaran que “perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado” es el paquete completo y la provisión del Nuevo Pacto.

Así es como podemos resumir mi tesis: Si NO hay una clara enseñanza – NO hay Nuevo Pacto – NO hay perdón de pecados – NO hay Nuevo Hombre Interior – NO hay crecimiento – NO hay Ministerio del Nuevo Pacto – NO hay Sacerdocio según el orden de Melquisedec – NO hay unción interior – NO hay revelación o visión – Fracaso – Frustración de los ministros – EL PROBLEMA VISIBLE

Si todo esto es realmente cierto, ¿cuál es la solución para el problema? Esta es mi respuesta: Si la forma en la que ha estado actuando el hombre no funciona, ¿por qué no probamos la forma que ha revelado Dios, pues quizás FUNCIONARÁ?

No debería ser difícil calcular toda la provisión del Nuevo Pacto y ver cuánto estamos experimentando. Si NO estamos experimentando TODO, quizás es porque no está funcionando. ¿Quiere esto decir que el Nuevo Pacto debe ser experimentado antes de que se manifieste en el Ministerio? Sí. Pero, ¿la doctrina no hará la misma cosa? NO. ¿Y la gracia de Dios? La gracia de Dios obra más completamente a través del Nuevo Pacto y nos permite experimentar su total provisión.

Pero se nos ha enseñado que por la gracia de Dios no tenemos que experimentar el Nuevo Pacto o cualquier otra cosa, sino que solamente debemos aceptar a Jesús como nuestro salvador personal. Pues, debemos saber que nos han enseñado cosas erróneas. Es PRECISAMENTE por esto que Dios quiere enseñarnos Él mismo, porque Él nos enseñará la Verdad. Él NO está LIMITADO por el error denominacional.

Hasta que esto suceda, ¿por qué no vemos lo que dice la Palabra escrita acerca del Nuevo Pacto y tratamos de identificar su provisión? Recuerda, el Antiguo Pacto llegó a su fin porque era insignificante y no podía llevar a nadie a la perfección. Por tanto, podemos estar seguros de que Dios no lo ha reemplazado por otro pacto que también sea insignificante y que no pueda llevarnos a la perfección.

Por tanto, recopilemos algunos de los versículos relacionados al Nuevo Pacto en los que podemos apreciar algunas de las provisiones más obvias que le permitirán al hombre agradar a Dios y traer gozo a su corazón.

Hebreos 8:7] Porque si aquel primero hubiera sido sin defecto, ciertamente no se hubiera procurado lugar para el segundo. [8] Porque reprendiéndolos dice: HE AQUÍ VIENEN DÍAS, DICE EL SEÑOR, EN QUE ESTABLECERÉ CON LA CASA DE ISRAEL Y LA CASA DE JUDÁ UN NUEVO PACTO; [9] NO COMO EL PACTO QUE HICE CON SUS PADRES EL DÍA QUE LOS TOMÉ DE LA MANO PARA SACARLOS DE LA TIERRA DE EGIPTO; PORQUE ELLOS NO PERMANECIERON EN MI PACTO, Y YO ME DESENTENDÍ DE ELLOS, DICE EL SEÑOR.

Hebreos 8:10] POR LO CUAL, ESTE ES EL PACTO QUE HARÉ CON LA CASA DE ISRAEL DESPUÉS DE AQUELLOS DÍAS, DICE EL SEÑOR: PONDRÉ MIS LEYES EN LA MENTE DE ELLOS, Y SOBRE SU CORAZÓN LAS ESCRIBIRÉ; Y SERÉ A ELLOS POR DIOS, Y ELLOS ME SERÁN A MÍ POR PUEBLO; [11] Y NINGUNO ENSEÑARÁ A SU PRÓJIMO, NI NINGUNO A SU HERMANO, DICIENDO: CONOCE AL SEÑOR; PORQUE TODOS ME CONOCERÁN, DESDE EL MENOR HASTA EL MAYOR DE ELLOS. [12] PORQUE SERÉ PROPICIO A SUS INJUSTICIAS, Y NUNCA MÁS ME ACORDARÉ DE SUS PECADOS Y DE SUS INIQUIDADES. [13] Al decir: Nuevo pacto, ha dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo y se envejece, está próximo a desaparecer.

Hebreos 10:15 Y nos atestigua lo mismo el Espíritu Santo; porque después de haber dicho: [16] ESTE ES EL PACTO QUE HARÉ CON ELLOS DESPUES DE AQUELLOS DIAS, DICE EL SEÑOR: PONDRÉ MIS LEYES EN SUS CORAZONES, Y EN SUS MENTES LAS ESCRIBIRÉ, [17] añade: Y NUNCA MÁS ME ACORDARÉ DE SUS PECADOS Y TRANSGRESIONES. [18] Pues donde no hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.

Jeremías 31:31] He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá. [32] No como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto; porque ellos invalidaron mi pacto, aunque fui yo un marido para ellos, dice Jehová.

Jeremías 31:33] Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo. [34] Y no enseñará más ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová; porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice Jehová; porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado.

Ezequiel 36:26] Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. [27] Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra.

Ezequiel 11:19] Y les daré un corazón, y un espíritu nuevo pondré dentro de ellos; y quitaré el corazón de piedra de en medio de su carne, y les daré un corazón de carne, [20] para que anden en mis ordenanzas, y guarden mis decretos y los cumplan, y me sean por pueblo, y yo sea a ellos por Dios.

Isaías 59:20] Y vendrá el Redentor a Sion, y a los que se volvieren de la iniquidad en Jacob, dice Jehová. [21] Y este será mi pacto con ellos, dijo Jehová: El Espíritu mío que está sobre ti, y mis palabras que puse en tu boca, no faltarán de tu boca, ni de la boca de tus hijos, ni de la boca de los hijos de tus hijos, dijo Jehová, desde ahora y para siempre.

1 Corintios 11:25] Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí.

Hebreos 13:20] Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno,

Hebreos 9:15] Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna.

Hebreos 9:16] Porque donde hay testamento, es necesario que intervenga muerte del testador. [17] Porque el testamento con la muerte se confirma; pues no es válido entre tanto que el testador vive.

Hebreos 9:18] De donde ni aun el primer pacto fue instituido sin sangre. [19] Porque habiendo anunciado Moisés todos los mandamientos de la ley a todo el pueblo, tomó la sangre de los becerros y de los machos cabríos, con agua, lana escarlata e hisopo, y roció el mismo libro y también a todo el pueblo, [20] diciendo: ESTA ES LA SANGRE DEL PACTO QUE DIOS OS HA MANDADO. [21] Igualmente roció con sangre la tienda y todos los objetos del culto…

Hebreos 9:22] Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.

Está claro que la sangre rociada es para la PURIFICACIÓN y la sangre derramada es para el perdón de pecados. Nos preguntamos por qué se hace tanto énfasis en la sangre derramada y ninguno en la sangre rociada.

1 Pedro 1:2] elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.

Hebreos 12:22] sino que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos millares de ángeles, [23] a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los justos hechos perfectos, [24] a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel.

La sangre de los mártires no se puede comparar con la sangre rociada de Jesús porque la “sangre rociada” es la única que nos limpia cuando obedecemos. Recordamos la sangre de los mártires, pero esta sangre no puede limpiarnos. La Cena del Señor nos recuerda la sangre, la cual es la Sangre del Pacto. Fue por esta Sangre del Pacto que Dios resucitó de los muertos al pastor de las ovejas, pero fue por la sangre rociada que Jesús entró en el Lugar Santo para rociar Su propia sangre, la cual aún testifica acerca de Su obediencia. Esta es la misma sangre rociada que nos limpia a medida que caminamos en obediencia. Fue la sangre rociada la que testificó acerca de Su total Obediencia, y fue Su obediencia la que eliminó totalmente cualquier defensa que tuvo Satanás por su desobediencia. El postrer Adán puede ahora juzgar a Satanás, el príncipe de este mundo, por medio de Su obediencia. Ahora, después de haber cumplido el propósito predestinado de Dios, Él es el mediador de un Nuevo Pacto.

Hebreos 10:19 Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo, [20] por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne, [21] y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios, [22] acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura.

¿Por medio de cuál sangre entró Jesús en el Lugar Santísimo? ¿Por la sangre derramada o por la sangre rociada? ¿Por medio de cuál sangre es limpio nuestro corazón de una mala conciencia? Nuestra conciencia renovada es la que nos indica cuando estamos en desobediencia.

Mala conciencia = G4190 πονηρός poneros pon-ay-ros’

πονηρός ponerós; de un derivado de G4192: dañino, o sea, malo (propiamente en efecto o influencia, y por eso difiriendo de G2556, que se refiere más bien a carácter esencial, al igual que de G4550, que indica degeneración de la virtud original); figurativamente: perjudicial; también enfermo, o sea contaminado; pero especialmente (moralmente) culpable, o sea abandonado, vicioso, perverso; neutro (singular) mala conducta, malicia, o (plural) culpa; masculino (singular) el diablo, o (plural) pecador:-malo, inicuo, severo, dañino, lascivo, malicioso, malévolo, maldad. Véase también G4191

“Poneros” puede traducirse como conciencia culpable o mala. Es fácil ver por qué el líder de la alabanza piensa que puede llevar la audiencia hacia el Lugar Santísimo con la música, pero se equivoca. La Sangre Rociada (la Sangre de la Obediencia) testificará contra esta persona si está en desobediencia.

1 Juan 1:7] pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

No es posible caminar en desobediencia y aun así caminar en la luz, como Él está en la luz. El perdón es por la sangre derramada y la purificación es por la sangre rociada. Ambos aspectos de la sangre de Jesús son esenciales para nosotros si queremos cumplir el Propósito de Dios para nuestras vidas.

Enseñar que la obediencia no es necesaria debido a la gracia es desconocimiento de la escritura, o quizás fidelidad humana a una doctrina denominacional no confiable.

Entonces, ¿cuáles son las provisiones del Nuevo Pacto que nos permitirán caminar en la Luz por obediencia, y ser limpios de todo lo que ofende a Dios y nos aleja de Su Presencia? ¿Cuáles son las provisiones que nos permitirán al menos, agradar a Dios, hacer Su voluntad y participar en el Gobierno de Su Reino? Descubrimos que existen cosas que Él debe eliminar de nosotros primeramente, antes de que lo correcto sea añadido.

(1) Quitaré de su carne el corazón de piedra, y les daré un corazón de carne.

(2) Pondré mi ley en ellos, y en su corazón la escribiré.

(3) Yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo.

(4) Perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado.

(5) Les daré un corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros.

(6) Pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que anden en mis estatutos y que guarden mis preceptos.

(7) Porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande.

(8) PORQUE SERÉ PROPICIO A SUS INJUSTICIAS, Y NUNCA MÁS ME ACORDARÉ DE SUS PECADOS.

(9) Y no enseñará más ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová

(10) El Redentor vendrá a Sion, y a los que se volvieren de la iniquidad en Jacob

(11) Y este será mi pacto con ellos dice Jehová: El Espíritu mío que está sobre ti, y mis palabras que puse en tu boca, no faltarán de tu boca

(12) ni de la boca de tus hijos, ni de la boca de los hijos de tus hijos, dice Jehová, desde ahora y para siempre.

Estas son algunas de las provisiones que Dios ha dispuesto por medio del Nuevo Pacto que corregirá todos los fracasos del hombre y lo preparará para heredar todas las cosas, así como para cumplir el propósito de Dios y gobernar sobre el mundo venidero. El Nuevo Pacto corregirá todo lo que NO pudo arreglar el Antiguo Pacto porque el hombre era carnal continuamente. Todos los hombres según el primer Adán tenían un corazón de piedra, por lo que no pudieron ser redimidos en la realidad del Nuevo Pacto. Dios tuvo que crear provisiones para quitar este corazón de piedra y reemplazarlo con un nuevo corazón (o nuevo hombre interior) que pudiera conocer al Señor y caminar en Sus caminos.

Podríamos resumir las principales provisiones del Nuevo Pacto y cómo éste difiere del Antiguo Pacto en este versículo.

2 Corintios 6:16]… Porque nosotros somos templo del Dios viviente, como Dios dijo: HABITARÉ Y ANDARÉ ENTRE ELLOS. YO SERÉ SU DIOS, Y ELLOS SERÁN MI PUEBLO.

“Entre” G1704 ἐμπεριπατέω emperipateō em-per-ee-pat-eh’-o

Entre G1704 ἐμπεριπατέω emperipatéo; de G1722 y G4043; deambular en un lugar, i.e. (fig.) - andar.

Si Dios vive en nosotros y camina con nosotros, toda la provisión que necesitamos para agradarle a Él será inherente en nosotros. Si Dios habita EN SU PUEBLO y a partir de esa VIDA INTERIOR es nuestro Dios, ¿qué más necesitaremos para hacer Su voluntad y vivir nuestra vida para agradarle? ¿Qué posible excusa podemos dar bajo el Nuevo Pacto para no agradar a Dios? Dios está obrando para que Su pueblo al fin sea capaz de agradarle.

Filipenses 1:6] firmemente convencido de que, quien inició en vosotros la buena obra, la irá consumando hasta el día de Cristo Jesús.

Filipenses 2:13] pues Dios es quien obra en vosotros el querer y el obrar, como bien le parece.

El hecho de que existen muchas cosas del viejo Adán y sus atributos en nosotros DESPUÉS que recibimos el perdón de pecados es la verdadera razón por la que Dios debe estar trabajando en nosotros continuamente para eliminar aquellas cosas que nos impiden hacer Su voluntad, cumplir Su propósito eterno y traer gozo a Su corazón. Al mismo tiempo, Él debe poner en nosotros TODAS las cosas que nos permitirán hacer Su voluntad.

Mientras que el “perdón de pecados” es necesario y maravilloso, este por sí solo no nos da la habilidad establecida por Dios para completar Su propósito eterno. Pondré un NUEVO ESPIRITU en ustedes, y luego pondré MI ESPIRITU en ustedes y los haré caminar en mis caminos es esencial y una de las cosas que fueron provistas por el Calvario. Pondré MIS LEYES en la mente de ellos y sobre su corazón las escribiré es también esencial si vamos a caminar en el Nuevo Pacto por obediencia. Moraré EN ELLOS y CAMINARÉ EN ELLOS es necesario si vamos a ser creyentes del Nuevo Pacto, y no solamente creyentes. No necesitarán que ningún hombre LES ENSEÑE porque serán todos ENSEÑADOS POR DIOS es otra provisión esencial que NO PUEDE ser ignorada por más tiempo si esperamos que Dios guíe la iglesia hacia la dimensión del Candelero.

Jesús dijo que EDIFICARÍA SU IGLESIA, pero ¿cómo esperamos que lo haga? A menos que seamos diligentes para experimentar TODA SU PROVISIÓN para la Iglesia del Candelero de Oro Puro, ¿Dios edificará Su iglesia de todas formas? ¿Con qué edificará Su iglesia del Candelero a menos que proveamos el oro puro, el cual es el carácter del Reino? ¿Cómo llegaremos a ser Oro PURO si no tenemos toda la provisión de Dios para producir el oro? Repetir el cliché “lo haremos por fe” no ha estado funcionando durante los últimos 40 años, así que ¿por qué creeríamos que funcionará en los próximos 40 años?

El Nuevo Pacto no es algo escondido que algún grupo puede revelar. Es tan simple que incluso pescadores ignorantes pueden experimentarlo y demostrarlo. Solamente la sabiduría de este mundo puede ser tan estúpida para no comprender las provisiones que fueron dadas por el Calvario y el Pentecostés. Ninguna de ellas es una opción SI queremos cumplir el propósito de la Iglesia del Nuevo Pacto. ¿Por qué? Porque queremos identificar la Iglesia del Nuevo Pacto como la Iglesia del Candelero de Oro Puro por entre la cual Jesús camina, y a la cual amenaza, corrige, advierte, acusa y enseña cómo DEBE ser la iglesia antes de ser aceptable para Él. Así es como Él está preparando a la iglesia para esa Gloriosa Presentación que es sin mancha, arruga o cualquier otra cosa semejante y que es santa e irreprensible.

Efesios 5:25] Maridos, amad a vuestras mujeres como Cristo amó a la Iglesia y se entregó a sí mismo por ella, [26] para santificarla, purificándola mediante el baño del agua, en virtud de la palabra, [27] y presentársela resplandeciente a sí mismo, sin que tenga mancha ni arruga ni cosa parecida, sino que sea santa e inmaculada.

Esto es mucho más que perdón de pecados porque la expectativa de Dios para la iglesia es mucho más que el perdón o la salvación. Es que sea perfecta y totalmente madura para poder ser presentada a Su Hijo. Jesús NO viene a buscar una novia que sea imperfecta.

El grupo en pañales ciertamente rechazará este hecho, pero dejemos que sea alguien más quien le cambie constantemente los pañales y prosigamos hacia la perfección, tomando en serio los principios que solamente son el comienzo de la vida cristiana. Porque el hecho de que los “cinco ministerios” constantemente repasen los principios de la doctrina de Cristo solo prueba que estos NO son los ministerios que Él ha designado para traer Su iglesia a la perfección. Cuando estos ministerios obran en contra de lo que Él enseña a Sus iglesias del Candelero en Apocalipsis 2 y 3, podemos estar seguros de que esto no es lo que tenía en mente en Efesios 4:11-15.